Empezando
con la sección de disciplinas, hoy trataré sobre una de las más
conocidas y practicadas: el salto.
El
salto de obstáculos consiste (como su nombre indica) en superar
obstáculos que se sitúan dentro de una pista, en un recorrido
determinado y con un tiempo estimado. Para ello, el binomio
caballo-jinete lleva a cabo una serie de acciones que se suceden
realmente rápido. Una de las partes más emocionantes de ésta
disciplina es la velocidad de la prueba -lo normal es que el
recorrido apenas dure un minuto- y la competitividad que ésta genera
entre los participantes.
Hay
diferentes tipos de pruebas de obstáculos, aunque la más común es
un recorrido dentro de una pista vallada, en la que se establece una
altura de salto. Otros tipos de pruebas pueden ser:
- Pruebas de dificultad, en las que se incrementa la dureza del recorrido o de los obstáculos a medida que se avanza en la prueba.
- Dificultad progresiva: Varios obstáculos que son progresivamente más difíciles en todos los aspectos (altura, aspecto, trazado...)
- Velocidad y conducción: Se valoran las destrezas del jinete, su forma de montar y la velocidad a la que se realiza el recorrido. En caso de que se añadan obstáculos naturales, terraplenes, etc; la prueba pasa a denominarse “Caza”. El recorrido no es fijo, si no que puedes escoger distintos trazados, ganando tiempo a cambio de aumentar la dificultad.
- Pruebas de recorrido, la dificultad reside en el propio recorrido o en la pista.
- Derbi: Prueba de aproximadamente 1 kilómetro de longitud, en el que hay obstáculos naturales.
- Dobles y triples: Seis obstáculos que se presentan como combinaciones, con al menos un triple y un obstáculo “simple”.
- Pruebas de potencia, en las que se valora el salto del caballo en pocos obstáculos que requieren un gran esfuerzo.
- 6 barras: Se sortean seis saltos verticales que se colocan en línea recta, a una separación de dos trancos. Desde aquí, la prueba puede variar entre obstáculos del mismo tamaño, de tamaños progresivos por parejas o de altura progresiva lineal (es decir, los 6 a la misma altura; los dos primeros a una altura, los dos siguientes a otra superior, etc; o cada uno más alto que el anterior) y se van haciendo desempates.
- Potencia: Trata de un obstáculo más complejo dentro de un recorrido normal, ya sea por altura o por ancho. Se establecen rondas, y el obstáculo suele ser un “muro”, que puede llegar a superar los 2 metros de altura.
- Salto alto y salto largo: Un único obstáculo, que tiene una altura o un largo mínimos y que va aumentando según avanza la prueba.
Las
reglas del salto de obstáculos no son muy complejas. Se basan en una
serie de penalizaciones que se dan al cometer alguna de faltas.
Dichas penalizaciones dan “puntos”, por lo tanto, cuantos más
puntos tenga un binomio al finalizar el recorrido, en peor posición
quedará. Además de éso, también se tiene en cuenta el tiempo en
que se realiza la prueba, y una serie de fallos que suponen la
eliminación de los concursantes.
Así
por ejemplo, el derribo de una obstáculo, su rehúse o un fallo en
el recorrido (no tomar los obstáculos en el orden o sentido
correctos, por ejemplo) suponen una penalización de 4 puntos. Por un
exceso del tiempo fijado como límite, se da una penalización de 1
puntos cada 4 segundos excedidos; y por una caída del caballo o
jinete o por un segundo rehúse se llega a la descalificación del
participante.
Aspectos
técnicos del salto.
En
el salto de obstáculos se distinguen 3 momentos -o movimientos- en
el caballo, que tienen sus correspondientes movimientos del jinete,
para mayor comodidad y efectividad del salto.
- Batida: Cuando el caballo salta (es decir, cuando pasa de galopar a subir las manos para sortear el obstáculo). Emplea para ello toda la potencia que llevaba del galope, que la dirige a los pies, para así poder levantar las manos con menor peso. También arquea el cuello, a fin de ser más aerodinámico.
- Vuelo: Los pies ya no están en contacto con el suelo, y las manos todavía no han comenzado a descender. El caballo está completamente extendido, y su posición recuerda a la de un felino (cabeza baja, cuello arqueado, espalda recta y extremidades recogidas). La potencia del salto ahora está dirigida hacia adelante.
- Recepción o caída: El caballo vuelve a tocar el suelo con las manos. En esta posición el cuello vuelve a elevarse, mientras que las manos están completamente estiradas, amortiguando la llegada, y los pies siguen recogidos, sorteando el salto. En cuanto los pies vuelvan a tocar el suelo, las manos podrán volver a iniciar el movimiento de galope.
Aquí vemos claramente las fases de batida, vuelo y recepción.
Imagen tomada de http://es.wikipedia.org/wiki/Salto_ecuestre
Para
cada una de las tres fases, el jinete adoptará una postura que será
la más adecuada para la comodidad de la montura. Con la batida, el
jinete se levantará de la silla, apoyando el peso en los estribos, y
se inclinará hacia adelante, sobre el cuello del animal, pero sin
cargar su peso en él. Mantendrá esta postura durante el vuelo, y
comenzará a echarse hacia atrás cuando el salto pase a la
recepción, en el que deberá retrasarse en la silla y retomar el
contacto, de forma que siempre tenga el control del caballo y del
recorrido.
Respecto
al tipo de obstáculos a sortear en las pruebas, se dividen en:
- Simples o Verticales : Su dificultad sólo reside en la altura, ya que no tiene fondo.
- Fondos u Oxer: Además de altura, tienen anchura, ya que son la combinación de dos simples que el caballo salta a la vez. Por lo general, la barra de atrás suele estar más elevada que la del lado por la que entra el caballo, pero si ambas barras están a la misma altura se llama “fondo cuadrado”.
- Triples barras: Como un fondo, pero en vez de dos obstáculos a la vez, se trata de tres.
- Rías: Un salto sin altura, sólo con fondo, que consiste en una especie de “piscina pequeña” enterrada en el suelo con un pequeño salto o seto en la cara por la que se aborda y que se debe sortear sin tocar los bordes.
Y
en cuanto a las combinaciones de saltos, tenemos:
- Dobles: Dos saltos entre los que hay una distancia igual o menor a dos trancos de galope.
- Triples: Tres saltos entre los que hay una distancia -entre cada uno- igual o menor a dos trancos de galope.
- Calles: Varios saltos, situados por lo general en línea recta, que no suelen distar en muchos trancos (por lo general suelen ser cuatro).
- Caer y partir: Dos o más saltos entre los que la distancia es tal que no permite al caballo dar ningún tranco entre obstáculo y obstáculo. Nada más recibirse (caer), el caballo ya tiene que volver a saltar (partir); de ahí su nombre. No es habitual verlo en competiciones ya que se suele usar más para entrenar.
Estos
son los aspectos en los que se basa el salto de obstáculos. Teniendo
estas definiciones, podré explicar más adelante ejercicios para
solucionar los posibles problemas que tengamos de una forma más
cómoda y sencilla.
Espero que os haya gustado, y que leáis el próximo artículo. ^_^
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